Beneficios

¿Qué es el Ácido Hialurónico?


El Ácido Hialurónico (AH) es un polisacárido que presenta una textura viscosa. Desempeña un papel destacado en la hidratación y elasticidad de los tejidos. Tiene la capacidad de retener agua en un porcentaje equivalente a miles de veces el peso de nuestro cuerpo. 

A pesar de estar repartido por todo el organismo, es más abundante en la piel, donde se concentra el 50% del total de ácido hialurónico del cuerpo. También en los cartílagos y las articulaciones, a los que ayuda a mantener sus propiedades funcionales.

También se encuentra mayormente concentrado en los fluidos de los ojos. Su uso médico está relacionado con la extracción de cataratas, trasplante de córnea, la reparación de desprendimientos de retina u otras lesiones oculares.


¿Para qué sirve el Ácido Hialurónico?


Es un componente natural que lubrica las articulaciones y está ampliamente distribuido por todos los tejidos y fluidos del cuerpo.

Desempeña un rol destacado en la cicatrización, regeneración celular y lubricación de articulaciones y tejido conectivo. Tener un buen nivel de ácido hialurónico es importante para mantener los tejidos lubricados y húmedos en todo nuestro organismo, especialmente en la piel y los tejidos conectivos de las articulaciones.

El ácido hialurónico es una sustancia que también regula la reparación de los tejidos, incluida la modulación de la respuesta inmunológica. Además, también tiene un importante papel en la formación de vasos sanguíneos.


1.   Hidratación   

       2.  Elasticidad   

            3.  Lubricante


Beneficios y propiedades del Ácido Hialurónico


El ácido hialurónico actúa como un amortiguador y lubricante en las articulaciones y otros tejidos. Su presencia, por tanto, es fundamental para los mecanismos moleculares, ya que su producción aumenta durante la lesión de los tejidos y la cicatrización de heridas. Unos niveles irregulares de esta sustancia en el organismo pueden afectar la forma en que el cuerpo responde ante las lesiones.

Sus propiedades son visibles en la piel, cabello y uñas en términos de hidratación, de la estructura de la barrera cutánea y elasticidad de la piel. También en la lubricación de huesos y articulaciones.

Para la piel

Casi la mitad de la concentración de ácido hialurónico del cuerpo se encuentra en las capas de la piel, tanto las más profundas como las visibles. La piel joven es lisa y elástica y contiene grandes cantidades de ácido hialurónico que ayuda a mantenerla visiblemente sana, proporcionando una humedad continua.

A medida que envejecemos, la producción de sustancias clave en la piel, incluyendo el ácido hialurónico, que es el componente predominante junto con el colágeno y la elastina, disminuye. Como resultado se produce el envejecimiento de la piel. Nuestra piel pierde hidratación y volumen, y comienzan a aparecer arrugas de mayor o menor profundidad, líneas de expresión, surcos nasogenianos o manchas en la piel.

Por tanto, incrementar los niveles de ácido hialurónico mediante suplementos o en pueden contribuir a la flexibilidad de la piel y a mejorar su hidratación, mejorando la capacidad de atraer y retener moléculas de agua.


Piel


Por sus propiedades hidratantes, el ácido hialurónico también puede contribuir a la mejora del aspecto del pelo encrespado, seco y sin brillo. 

En su estructura, el cuero cabelludo es idéntico al tejido de la piel ubicado en todo el cuerpo, salvo porque contiene folículos pilosos que dan origen al cabello. 

La dermis (capa externa) y la epidermis (capa profunda) conforman las capas de la piel, siendo en esta última donde se encuentra el folículo piloso. Es en esta donde el ácido hialurónico juega un papel fundamental, proporcionando nutrición e hidratación al cuero cabelludo, dando lugar a un cabello brillante y saludable.

Share by: